Diversos tipos de té pueden aportar beneficios a la salud, desde mejorar la digestión hasta fortalecer el sistema inmunológico. Sin embargo, la Universidad de Harvard destacó especialmente al té de jengibre como una opción poderosa: esta infusión natural está repleta de antioxidantes y cuenta con propiedades antiinflamatorias que ayudan a combatir el dolor, convirtiéndose en una de las bebidas más recomendadas para el bienestar diario.
Las infusiones de hierbas no contienen hojas ni brotes de la planta del té, sino que se elaboran a partir de tisanas, que son mezclas o extractos de frutas secas, flores, especias o hierbas en agua, según puede leerse en la recomendación de la Escuela Médica de Harvard. Muchas de estas preparaciones cuentan con características beneficiosas para la salud y fueron utilizadas como remedios naturales durante siglos.
No obstante, los expertos en nutrición recomiendan consumirlas con moderación y bajo supervisión médica, especialmente en personas con ciertas condiciones de salud. Asimismo, es aconsejable evitar aquellas que contengan azúcares añadidos u otros aditivos.
Entre los tés saludables que destaca la institución, se encuentra el de jengibre. Reconocido como un remedio efectivo contra las náuseas, esta infusión tiene un sabor picante y robusto. Su principal compuesto bioactivo, el gingerol, es un potente antioxidante presente en esta antigua raíz. Además, contiene pequeñas cantidades de vitaminas B3 y B6, hierro, potasio y vitamina C.
Harvard afirma que numerosos estudios avalan las propiedades medicinales del jengibre, utilizado tradicionalmente para tratar diversas afecciones. Se comprobó que estimula el sistema inmunológico y reduce la inflamación. Una revisión sistemática reciente respalda su eficacia para aliviar trastornos gastrointestinales, inflamación y dolencias vinculadas a síndromes metabólicos.
Sin embargo, el jengibre puede ralentizar la coagulación sanguínea, lo que podría representar un riesgo para personas que consumen medicamentos antiplaquetarios como aspirina o clopidogrel, o anticoagulantes como apixaban o rivaroxaban. También puede aumentar el riesgo de sangrado durante y después de cirugías.
Harvard también destaca otras infusiones saludables, como el té de manzanilla y el té de hibisco, ambos valorados por sus múltiples beneficios.
El té de manzanilla, obtenido de las flores de la familia Asteraceae, fue utilizado desde la antigüedad como remedio natural para diversas afecciones. Posee compuestos antioxidantes, así como minerales y vitaminas como potasio, calcio, caroteno y folato. La institución indica que varias investigaciones sugieren que puede reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, fortalecer el sistema inmunológico y proteger contra ciertos tipos de cáncer.
También se asoció con alivio del síndrome premenstrual, efectos antiinflamatorios, ansiolíticos e incluso la ralentización de la pérdida ósea relacionada con la edad. Sin embargo, Harvard advierte que, quienes padecen alergias severas, especialmente al polen, deberían evitar su consumo.
Por otro lado, el té de hibisco se prepara con los cálices secos de las flores de hibisco, que aportan un sabor refrescante y ácido, además de antioxidantes. Esta infusión ofrece beneficios antivirales y cardiovasculares, que incluyen la reducción de la presión arterial y la disminución de colesterol y triglicéridos. No obstante, quienes consumen ciertos medicamentos como la aspirina deben tener precaución y consultar con un médico debido a posibles interacciones.