La salida de Diego Valenzuela del PRO hacia las filas de La Libertad Avanza (LLA) sacudió los cimientos del espectro político argentino. No se trata sólo de un traspaso de camisetas, en detrimento de Mauricio Macri; es, como dicen en los pasillos de la política, un movimiento que reconfigura alianzas y redefine lealtades.
El mensaje de bienvenida del presidente Javier Milei fue el disparador para que el intendente de Tres de Febrero rompiera el silencio y justificara su decisión.
“Lo decidí con madurez y razón a lo largo de este último año. Hemos decidido, junto con Patricia Bullrich, acompañar el cambio que hoy está a cargo de Javier Milei, así como lo lideró Mauricio Macri en 2015. Claramente, un gran desafío es enchufar la Provincia al cambio nacional. Tengo ganas de estar en un espacio en el cual pueda aportar más y de construir la provincia que yo imagino, más ágil, abierta al trabajo, con seguridad”, declaró Valenzuela en la noche de este jueves 16 de enero en una entrevista con LN+.
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Según reveló el propio intendente, la decisión fue madurando tras un diálogo constante con Milei. “Hablo bastante con Milei. De hecho, lo vi hace poco en Olivos. Como aliados, le pregunté para hacer algo desde el proyecto, porque no es lo mismo acompañar que ser parte y protagonista. La confianza que tengo con él me permite poder decíselo”, explicó.
Valenzuela aseguró que el presidente valoró la iniciativa: “A él le gustó la idea y por eso estamos acá. Yo apoyo el cambio y no me modificó la camiseta. Estamos trabajando para unir las dos versiones para derrotar al populismo y a Kicillof en la provincia de Buenos Aires”.
La decisión de Valenzuela no estuvo exenta de críticas. Diego Guelar, exembajador y dirigente del PRO, fue categórico: “Bye, bye. El intendente de Tres de Febrero se pasó del Pro a LLA. Otro tránsfuga. Cuando la identidad se transforma en oportunismo. Mala fariña, así no se construye la coalición de gobierno que tanto necesitamos”.
Sin embargo, Valenzuela defendió su posición: “Yo lo hice por convicción, sin ningún tipo de condicionamiento ni especulación. No le pedí al Gobierno ninguna obra ni cargo. Este proyecto es potente para desarrollar algún cambio en la Provincia. Luis Caputo, Federico Sturzenegger, Luis Petri, Patricia Bullrich y muchísimos otros ya lo vienen haciendo. Es totalmente natural lo que estamos proponiendo y yo creo que lo van a seguir un montón más después de mí”.
El intendente también lamentó el cierre progresivo del PRO como espacio de discusión y debate: “Lo que lamento es que el PRO se cerró. Se achicó y hubo menos espacio para el consenso y el debate. Yo lo que busco es fortalecer el cambio, que está por delante de las personas y los partidos”.
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La inseguridad en provincia de Buenos Aires: un eje prioritario
La charla con Valenzuela no se limitó a cuestiones partidarias. Consultado sobre un reciente hecho de inseguridad en Morón, donde tres delincuentes fueron detenidos tras herir a varios policías, el intendente fue contundente: “Los tenemos que ir a buscar, hay que tomar las denuncias de los vecinos. Está bueno que la Policía tenga una actitud proactiva y que entre, pero también hay que ir con las denuncias ante la Justicia para producir un allanamiento e ir al fondo de la cuestión, que es donde está el crimen organizado. No alcanza con patrullar”.
A su vez, destacó la importancia de la gestión de Patricia Bullrich en materia de seguridad y su aplicación en la provincia de Buenos Aires: “Ahora que la inflación bajó, la seguridad es el tema número uno. Lo que ha mostrado la ministra Bullrich en Santa Fe es lo que hay que hacer en la provincia de Buenos Aires, pero lamentablemente tenemos un gobernador que por ideología se esconde de este tema. No lo termina priorizando lo suficiente”.
La movida de Valenzuela deja en evidencia una tensión latente dentro de la oposición. El PRO, que alguna vez lideró el cambio con Macri, parece estar perdiendo terreno frente a un Milei que no solo se consolida como presidente, sino también como eje aglutinador de voluntades disidentes.
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