El Gobierno ha implementado una medida significativa al ampliar la edad límite para que los pilotos puedan realizar vuelos, una decisión que busca responder a la creciente demanda del sector aeronáutico y optimizar los recursos humanos disponibles.
Esta medida del Gobierno, dispuesta por la interventora de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), María Julia Cordero, ha sido oficializada a través de la Resolución 516/2024, publicada en el Boletín Oficial.
La nueva normativa establece que los pilotos podrán seguir operando aeronaves hasta los 66 años en el caso de vuelos que requieran la operación de un solo piloto, y hasta los 68 años para aquellas aeronaves que necesiten dos pilotos.
Anteriormente, la edad límite era de 60 años para vuelos con un solo piloto y de 65 años para vuelos con dos pilotos. Esta ampliación de la edad de jubilación se aplicará tanto a vuelos nacionales como a conexiones internacionales, siempre y cuando se respeten las limitaciones de edad impuestas por la normativa vigente en el país de operación.
La decisión de ampliar la edad límite para los pilotos se basa en varios factores. En primer lugar, responde a la necesidad de cubrir la creciente demanda del sector aeronáutico, que ha experimentado un aumento significativo en los últimos años.
La escasez de pilotos habilitados para volar aviones de gran porte, especialmente después de la pandemia, ha sido un desafío constante para las aerolíneas. Además, los avances en la medicina y el aumento de la esperanza de vida han permitido que los pilotos puedan mantener sus condiciones psico-físicas y habilidades necesarias para operar aeronaves de manera segura durante más tiempo.
Medidas
La medida también se alinea con las tendencias internacionales en la normativa aeronáutica, donde varios países han flexibilizado las edades de jubilación y continuidad laboral para los pilotos. Esta tendencia global busca aprovechar al máximo la experiencia y pericia de los pilotos, permitiéndoles continuar ejerciendo sus funciones en operaciones de transporte aéreo comercial.
La implementación de esta nueva normativa no ha estado exenta de controversias. La decisión se produjo en medio de un conflicto entre el gobierno y Aerolíneas Argentinas, que incluyó varias jornadas de paros y amenazas de privatización. Sin embargo, el conflicto se resolvió con un acuerdo entre el Ejecutivo y los sindicatos del sector, que contempla un aumento salarial del 16% para el período junio-noviembre, además de una serie de mejoras adicionales.
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