En el marco del comienzo del debate de la Ley de Bases y el paquete fiscal en la Cámara de Diputados, el senador del Partido Justicialista (PJ), Mariano Recalde, adelantó este lunes que si los proyectos avanzaran con media sanción hacia la Cámara alta la oposición ya cuenta con “33 votos firmes” para bloquearlos. Así, el parlamentario destacó que necesitarían otros tres votos para frenar las iniciativas oficialistas, lo que “depende de muchas cosas”. “Cuando el Gobierno se ponga encima vamos a tener que operar fuerte porque van a llover todo tipo de propuestas, ofertas y amenazas para que lo acompañen”, acusó.
Consideró también que deben esperar a ver que pasa en Diputados, porque quizás “no tienen de qué preocuparse”, insinuando que la ley podría caerse en esta primera instancia, tal como sucedió con la entonces ley ómnibus en enero de este año. “Siempre puede pasar eso, no pierdo las esperanzas y los compañeros están trabajando para que la ley no pase”, consideró en diálogo con Futurock.
Sobre la posibilidad de aliarse con otros partidos para rechazar la normativa, Recalde analizó que lo que le hace falta al peronismo y al país en la actualidad es “reconstruir la fuerza política y defenderse del gobierno neoliberal de Javier Milei”. “Es la etapa de juntarnos en el Congreso para votar contra las leyes que propone; si no empezamos por ahí no me imagino juntándonos más adelante con gente que votó esas cosas”, determinó, y detalló: “El eje hoy es pueblo-antipueblo, por lo que podemos juntarnos en el futuro con los que voten contra la Ley de Bases”.
Por otro lado, hizo una autocrítica sobre el papel del peronismo en las elecciones de la ciudad de Buenos Aires. “Tenemos el mismo eje que siempre; no buscar salidas novedosas y defender la salud, la educación, el espacio público. En la próxima elección los porteños van a querer un gobierno que haga eso y vamos a tener la oportunidad de cambiar”, sostuvo, y agregó: “Tenemos que seguir en la nuestra y en algún momento vamos a construir la mayoría. Los problemas centrales que genera el macrismo en la ciudad siguen siendo los mismos: no hay vacantes en las escuelas, hay falta de inversión, aparecen cosas como la justicia laboral pro-empresaria, ganaron las elecciones prometiendo ocho kilómetros de subte e hicieron solo dos en 16 años”.
“Todavía no logramos construir una mayoría pero sí ganamos parte de la Ciudad. No hay que darse por vencidos, en algún momento vamos a volver a ganar la Ciudad”, auguró, mientras que destacó que en las últimas elecciones “no fue difícil” cerrar las listas del PJ “con los sectores de la CGY y la CTA y todo el mundo adentro”.
Finalmente, hizo hincapié en que en el Senado todavía no se trató el tema de la nominación de los jueces Ariel Lijo y Manuel García Mansilla para la Corte Suprema de Justicia. Cuestionó que “hay un silencio total” respecto de ese tema, y que aún no se mantuvo ningún tipo de conversación. “Estamos esperando que avance el procedimiento y veremos qué hacemos con ese tema”, reflexionó.
En otra instancia, el senador justicialista se refirió al discurso que dio la expresidenta Cristina Kirchner en Quilmes el pasado sábado, en donde combinó críticas al gobierno de Milei con un mensaje hacia el propio peronismo. “Es esclarecedor escucharla hacer un análisis sobre qué hay que hacer y qué no. Sin ninguna duda sigue siendo la dirigente política con mayor claridad para analizar la realidad”, sostuvo, y afirmó: “Sobrevoló los temas con una altura que nadie llega a tener, y ordenó el chisporroteo demostrando que está metida en el tema, habla con todo el mundo y es la que conduce la mayor porción del peronismo en la argentina”.
“Le habló a la gente y luego a los dirigentes y militantes, y dio instrucciones sobre lo que hay que hacer, cómo convencer a la gente que no nos votó para recuperar la mayoría”, siguió. Y cerró: “La militancia tiene que tener claros los temas y para eso hacía falta una clase magistral como la que dio Cristina”.
LA NACION