La salida de Rosina en Gran Hermano le dejó un vacío emocional muy grande a Zoe Bogach, pero que para Lucía Maidana fue importante por su reencuentro. Dentro de esta polémica, la participante recientemente eliminada habló de todo.
Su rivalidad con Furia le terminó costando muy caro a Beltrán, quien jamás se imaginó este desenlace y creía que iba a llegar hasta la final. Sin embargo, las buenas estrategias de su compañera le costaron una salida directa.
“Tu gran rival ahí fue Furia, que te insultaba de todas las maneras. Ya lo vas a ver. Ella te odiaba desde el principio y, durante las últimas semanas, esto fue peor«, le comentaron a Rosina en El debate de Gran Hermano.
A diferencia de la opinión de los panelistas, Rosi aportó una versión diferente desde su análisis como jugadora: «No estaba enterada de eso. La verdad es que no percibía que ella estuviera tan en contra mío. No lo percibía porque a mí ella no me lo demostraba«.
ROSINA HABLÓ SOBRE SU PASO POR GRAN HERMANO
Recordando que Beltrán tuvo un ataque de nervios cuando ingresaron los nuevos participantes, Florencia, Mauro, Darío, Damián y Paloma, eso la corrompió por completo. Allí se despertaron cada uno de sus miedos e inseguridades, sin poder seguir adelante.
“Yo sentí cuando ellos entraron que me desestabilizaron un montón. Eso me ‘desnorteó’ y me costó remontarla. Pero bueno, salí a flote como pude e intenté seguir. En la casa me juzgaron por mi personalidad, por cómo soy. Si soy tonta, si me hago, si soy niña. Yo soy así como me ves. No puedo fingir algo que no soy«, reconoció Rosina.
Entendiendo su situación y porque también estuvo en su lugar, Julieta Poggio, que participó como invitada en el lugar, le envió sus buenas energías a Beltrán: «Es imposible fingir al estar todo el día con las cámaras«.