Con menos afluencia que años anteriores por el temor por el dólar y los precios más caros, muchos turistas argentinos igual plantarán bandera una vez más en las playas de Florianópolis, como fieles conquistadores de este sureño destino de Brasil.
Más allá de la incertidumbre económica, hay un indicador de que este verano la felicidad de los veraneantes podría no tener fin. Se apunta a que una «amenaza» invisible, que la temporada pasada le quitó placer a sus playas, esta vez esté bajo control.
Según confirman a Clarín desde la Superintendencia Municipal de Turismo de Florianópolis, el llamado Pacto por el Saneamiento de las Aguas del Estado de Santa Catarina, «el más grande de la historia de la ciudad», como aseguran, comenzó hace meses y evitaría que se repita la epidemia de diarrea aguda que el verano pasado afectó a más de 5.000 veraneantes.
Entre fines de diciembre y el 31 de enero, ese inoportuno brote mantuvo a más de la mitad de sus playas, el 57%, como «impropias» para sumergirse.
El último informe, de la semana pasada, muestra un panorama, por el momento, muy alentador para los 2,5 millones de turistas que se espera que lleguen a Florianópolis.
Las condiciones generales de balneabilidad arrojan el 82,26% de las playas aptas para meterse al agua. De 62 puntos de muestreo de agua, 51 son seguros para baño.
Canasvieiras, Barra Da Lagoa, La Joaquina, Ponta Das Canas y la mayor parte de Ingleses, además de Jureré Internacional, las playas más elegidas por los argentinos, tienen bandera azul: son «próprias para banho«.
Desde el Instituto de Medio Ambiente de Santa Catarina, que realiza un monitoreo constante de aguas en 237 puntos turísticos, dicen a Clarín que «entre abril y octubre se viene realizando la investigación mensualmente» para garantizar la seguridad de las aguas.
Desde balneabilidade.ima.sc.gov.br, quienes viajen a Florianópolis podrán chequear el mapa del estado «seguro» de las playas, y tomar una decisión informada antes de dar un chapuzón.
Qué virus azotó el verano pasado
A fines de enero de este año, científicos de la Universidad Federal de Santa Catarina determinaron que la «epidemia» de gastroenterocolitis fue causada por norovirus.
Ese virus se halló en dos de cada tres muestras humanas de pacientes con descompostura.
Es fácilmente transmisible a través de bebidas y alimentos contaminados, como también por bañarse en playas señalizadas como inapropiadas, porque los gérmenes que causan enfermedades gastrointestinales pueden transmitirse a través del agua recreativa contaminada por un saneamiento deficiente.
Los casos se replican principalmente a partir de aglomeraciones o la presencia en lugares cerrados. El pico en Floripa fue en la segunda semana de enero, con más de 3 mil casos.
¿Podría azotar de nuevo esta temporada? La posibilidad existe.
La balneabilidad -la banderita de playa «propia» o «impropia» según la calidad del agua- está directamente vinculada a las condiciones sanitarias de los municipios, es decir, a la infraestructura de saneamiento básico, la población permanente y visitante, además de las condiciones climáticas.
Algunas ciudades de Santa Catarina, como su capital, Florianópolis, llegan a duplicar su población durante los meses de temporada alta, lo que sobrecarga los sistemas de recolección y tratamiento de las aguas residuales.
Florianópolis se estuvo preparando para que la historia no se repita. Al menos, no a igual escala. Habrá que esperar hasta los primeros días de enero 2024 para saber si el plan preventivo funcionó.
El punto de comparación será que en los primeros 10 días de 2023 ya se habían registrado 1.251 casos de gastroenterocolitis.
«En respuesta al escenario de la temporada anterior, en el norte y sur de la isla se llevó a cabo el desazolve y la limpieza de cursos hídricos que desembocan en el mar y que necesitaban intervención desde hace años. En otro frente, se intensificó la fiscalización diaria de los sistemas de tratamiento de aguas residuales, combatiendo puntos de descarte irregular en toda la ciudad, que podrían convertirse en contaminantes», detallan a Clarín desde la Municipalidad de Florianópolis.
Además, se sumó tecnología, podría decirse, «anti diarrea». Como un robot «con capacidad para acceder a puntos profundos de la red pluvial, construida para el drenaje del agua de lluvia y donde suele ocurrir el descarte indebido de efluentes de redes domésticas».
Este Pacto por el Saneamiento se convirtió en ley en agosto en ese Estado. El objetivo es la cobertura casi total de las redes de alcantarillado, lo que mejorará la calidad de las aguas de las playas brasileñas.
Cobertura de salud gratuita para turistas
El municipio de Santa Catarina será el primero del país en ofrecer atención médica exclusivamente para turistas. Se llama Alô Saúde Floripa. Desde el 17 de diciembre, los visitantes podrán tener una videoconsulta gratuita a través del Sistema Único de Salud (SUS).
Para acceder a la asistencia hay que llamar al 0800-333-3233, línea que estará disponible las 24 horas hasta el 28 de febrero. «Es importante que antes de acercarse a cualquier unidad de salud, el turista primero llame a ese número«, aclaran desde el municipio. Tras la videoconsulta, se decidirá la eventual indicación de dirigirse a un centro de salud.
AS