Antes de ponerse en marcha, la comisión que tenía planeado conformar el Gobierno para desarrollar una versión pulida, o “libertaria”, del fallido proyecto de Ficha Limpia del PRO, está en duda. El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se comunicó con el abogado Alejandro Fargosi y con la principal impulsora en el Parlamento, Silvia Lospennato para conformarla. Pero el primero se mostró reticente a integrarla y pidió celeridad para tratar el tema, en sesiones extraordinarias, y por ahora, en la Casa Rosada no tienen apuro y siguen firmes en hacer un análisis previo. Mientras que el macrismo pone en duda su acompañamiento.
Milei le había encargado a Francos que se hiciera cargo de coordinar el rediseño de la norma que nació en 2018 por iniciativa de la sociedad civil y que el PRO tomó como una bandera propia en el Congreso. Y había convocado personalmente para que asesorara al Gobierno –ad honorem– a Fargosi, que había integrado la campaña nacional de Gastón Marra por Ficha Limpia hace seis años; y a la diputada Lospennato, para que pudiera participar de la modificación de su propia iniciativa.
El Presidente hizo esa jugada la semana pasada, horas después de que el debate legislativo de Ficha Limpia se frustrara por falta de quórum de todos los bloques del Congreso, incluido La Libertad Avanza. Y apenas el martes, Fargosi le entregó al Presidente un borrador con sus ideas para el nuevo proyecto, que consta de dos artículos. El primero, con el texto de Lospennato completo. El segundo, con una regulación procesal en una referencia al artículo 61 del Código Nacional Electoral, que versa sobre la posibilidad de apelación al eventual rechazo de una candidatura (aunque con un plazo más corto para que la Justicia resuelva); una alusión a la aplicación de las medidas cautelares; y la creación de un registro en la Cámara Nacional Electoral donde se notificarían las sentencias.
Veinticuatro horas después, Francos se comunicó con Fargosi y con Lospennato, por separado, para constituir la comisión que evaluaría esas modificaciones. Pero el letrado, como expresó anteayer a este medio, le transmitió que estaba interesado especialmente en que el proyecto fuera llevado al Congreso de inmediato, en las sesiones extraordinarias -que aún no habían sido convocadas-. Y no se mostró dispuesto a participar en un órgano para debatir el tema, justamente porque demoraría su tratamiento.
“Hasta un señor del público me pide por Ficha Limpia. Es maravilloso: seis años de esfuerzo, pero al fin la gente lo pide. Ojalá entre en Extraordinarias. Mi asesoramiento, hecho”, dijo al día siguiente el abogado, en su cuenta de X.
Estas condiciones obligaron al oficialismo a recalcular el rumbo, poque la Casa Rosada no tenía planes de acelerar el tratamiento. Al contrario, quería evaluarlo y ganar tiempo para buscar consensos. “Ahora vamos a tener que revisar la idea de la comisión”, dijeron ayer. Sobre el borrador que les extendió Fargosi a Milei y Francos, en principio un funcionario deslizó que sería “raro” que se evalúe un proyecto redactado por un abogado que no participaría del análisis.
A pesar de que Fargosi pidió celeridad, Milei firmó ayer el decreto que llama a Extraordinarias con un temario conformado por seis proyectos, pero sin Ficha Limpia. Llamativamente, incluyó un proyecto que no había estado en el radar hasta unas horas antes de que el vocero Manuel Adorni anunciara los temas: la limitación de los fueros. Una iniciativa impulsada por Santiago Caputo, el principal asesor presidencial, que está en contra de Ficha Limpia en cualquiera de sus adaptaciones.
En el Gobierno se mostraron sorprendidos por la reticencia de Fargosi a debatir el tema internamente y creen que se debió, además de su ímpetu por apurar la iniciativa, a las críticas que recibió durante los últimos días, cuando el Colegio Público de Abogados salió a aclarar que el letrado no pertenece a su nómina y multiplicaron los dardos en su contra en la red social X, donde Fargosi es muy activo. “No viene de la política, es lógico”, dijo un funcionario libertario.
Milei podría ampliar el temario de Extraordinarias, pero en su entorno vienen insistiendo en que Ficha Limpia, si bien es un tema importante para el Presidente, no es urgente. Además, sus funcionarios más relevantes no están de acuerdo. Por caso, el propio Francos había mostrado sus pruritos, en la línea de Caputo.
La charla con Lospennato fue más amena, pero los avances de estas modificaciones quedaron en veremos. Es que, además del apuro de Fargosi, la tropa amarilla no está convencida de plegarse a la iniciativa del oficialismo: algunos dicen que implicaría dejarse “manosear” por los libertarios, en un momento de tensión por la falta de consenso por el Presupuesto y de malestar de Macri con Milei, y viceversa. Todo indica que el tratamiento del proyecto que Milei buscó reflotar se demorará, excepto que el Presidente cambie de opinión y decida acelerarlo, como pidió el abogado que convocó para desarrollarlo.