De Wanda Nara se dijeron un millón de cosas. Que es polémica, que miente, que se la juega por amor, que es la más viva de todas, que hace todo por dinero, que da la vida por sus hijos, que era virgen, que no era virgen, que salió con uno, que salió con otro, que es ostentosa, que gasta de mas, que usa ropa y accesorios truchos y no originales, que esto, que lo otro. Sin embargo, no se había dicho todo: ahora le tiraron por la cabeza que es «ordinaria como canapé de mondongo».
Quien «destrabó una nueva manera» de llamar a la reina de las mediáticas -ahora convertida en empresaria, presentadora televisiva y dede hace unos años manager de Mauro Icardi y probablemente futura representante de los hijos que juegan al fútbol- fue Rodrigo Lussich, quien se la cruzó en un evento reciente y se fue con la peor de las impresiones.
Todo sucedió en los Martín Fierro a la televisión que se entregaron hace unos días en el Hotel Hilton de Buenos Aires, pero los hechos se conocieron ahora que el propio conductor de Socios del espectáculo lo dio a publicidad en el ciclo que lidera junto a su coequier «de toda la vida», Adrián Pallares.
Los dos, precisamente, tuvieron el disgusto cuando quisieron acercarse hasta la mesa que ocupaban Susana Giménez y Mirtha Legrand para sacarse una fotito con las dos selfies. Y sí, los famosos también son cholulos como cualquier hijo de vecino. Pallares y Lussich estaban en plena tarea cuando fueron literalmente «llevados por delante» por Wanda.
QUE PERIODISTA CALIFICO COMO «ORDINARIA COMO CANAPE DE MONDONGO» A WANDA NARA
«Una ordinaria Wanda. Se metió entre nosotros sin decir nada ni avisar nada, y como quedamos detrás suyo porque ella nos ganó el lugar y no le íbamos a decir nada, terminamos apoyándonos en la cola para sacarnos la selfie. La usamos de mueble, como si fuera un aparador. Y bueno, por meterse donde no debía» descerrajó Lussich con toda su furia.
Si bien Pallares intentó defenderla y poner un poco de paños fríos a la visceral crítica de su compañero, Lussich no se amedrentó y recargó munición para cargar con más énfasis aun sobre Nara. «Es ordinaria, Adri, ordinaria como canapé de mondongo» bramó mientras su colega no sabía donde meterse.