Guadalupe Vázquez y Thelma Fardín, que tienen opiniones muy distintas en cuanto lo político y social, estuvieron como invitadas al programa de Juana Viale. Allí mantuvieron una fuerte discusión, la cual trataba sobre la ineficacia del Ministerio de la Mujer.
«El Ministerio de la Mujer tenía 1362 empleados, que lo llenaron de militantes. Encima los femicidios durante la gestión de Alberto Fernández aumentaron, hubo récord de femicidios en su gestión. Entonces, si estaban implementando muchas políticas y muchos programas, la verdad es que no funcionaron, habría que ver otra cosa. Lo que hizo el Gobierno (de Milei) no es desmantelar el 144, sino sacar a los que están de más», comenzó la periodista.
Y Fardín le respondió: «No es así. El 144 si fue desmantelado. Hay muchas mujeres que trabajaban en el 144 que no están más. No alcanza la gente que hay en el 144. No alcanzaba antes, no alcanza ahora. Hace poco me crucé a una mujer que trabajaba en el 144 y me dijo que nunca alcanzó».
A lo que Vázquez sentenció: «Si no alcanzaba el personal del 144, lo que tendrían que hacer es una auditoria y mostrar la evolución, los caso resueltos, los resultados. Si no alcanzaba el personal, tendría que estar eso detallado. Se manejaban así, iban a pedir plata diciendo que no les alcanzaba, que tenían que tomar más gente. Cuando tomaban gente nadie medía la cantidad de empleados, tareas asignadas, resultados del programa».
GUADALUPE VÁZQUEZ HABLÓ DE LOS CASOS CONTROVERSIALES DEL PERONISMO
«En el Peronismo nadie habla de Espinoza. Hablan todos de Alberto porque es un paria político, pero qué pasa con Espinoza, que está procesado por acosar a sus empleadas. Encima sigue siendo Intendente. En la Campora hubo casos que fueron acallados, tapados con dinero de señoritas que denunciaban que las encerraban en el baño, que habían dirigentes que se ponían violentos. Todo eso fue tapado y nunca se habló», sostuvo Guadalupe.
«Con lo de Alperovich podrían haberlo sacado, hacerle juicio político y eligieron darle licencia. El mensaje es muy grave. Lo dijo Grabois el otro día: ‘sabíamos que Alberto Fernández era un candidato indigno, pero por el proyecto lo votábamos. Sabíamos que Scioli era un candidato indigno, pero lo votábamos’. Esto funciona como una omertá, una especie de mafia que decían ‘a esto lo tapamos en función de nuestro proyecto’. El mensaje termina siendo muy grave», cerró.