julio 21 10:52 2024 Imprimir noticia
Finalizó el proceso de reforma de la Constitución provincial. El oficialismo dice que se ampliaron derechos y la oposición que todo lo actuado es nulo. ¿Habrá judicialización? Los avances y los temas en los cuales se quedó a mitad de camino. El secreto mejor guardado del quintelismo. Por Mattías Meragelman.
Desde el viernes -y luego de su publicación en el Boletín oficial- la nueva constitución de la provincia de La Rioja se encuentra vigente. Este lunes llegará el turno de los convencionales de jurarla y terminar de esa manera su participación en el proceso. Mientras que todo indica que el próximo 9 de agosto sería el día elegido para que Ricardo Quintela y Teresita Madera la juren, como principales autoridades provinciales.
La máxima norma de la Provincia establece un límite a la posibilidad de reelección de los diputados y concejales (una sola reelección consecutiva, igual que en el ejecutivo provincial y municipal), periodicidad de 10 años en los cargos de los integrantes del Poder Judicial (se aplicará en las nuevas designaciones), amplió la cantidad de miembros del Tribunal Superior de Justicia de cinco a siete, sumó una renta para todos los ciudadanos riojanos que no tengan ingresos, incorporó la promoción de la paridad de géneros en los cargos electivos y reconoció diferentes derechos que a partir de su entrada en vigencia tendrán rango constitucional.
Sin embargo, el proceso de reforma constitucional podría no haber terminado de cerrarse y hay varios temas que estarían condicionando la agenda política de los próximos años.
La oposición no estuvo en el recinto durante las últimas sesiones de la Convención y todo indica que tampoco darán el presente en la jura de este lunes.
“Se incluyeron articulados que no estaban dentro de la ley de convocatoria a la Convención, se lo advertimos al oficialismo, esto pone a la convención en una situación de nulidad absoluta”, dijo en “Riojavirtual Radio” la presidenta del bloque de convencionales del radicalismo Cristina Salzwedel. El punto al que hacen mención es a la posibilidad de darle rango constitucional al Defensor de la Víctimas.
Fuera de micrófono, varios referentes de la oposición consultados no descartaron que el proceso se judicialice y que termine en estrados nacionales, es decir que haya planteos judiciales cuestionando la validez de lo sancionado por no haber cumplido con el proceso correspondiente.
Desde el oficialismo tienen otra mirada. Remarcan que se avanzó en la periodicidad de los jueces, que se ampliaron derechos y que los convencionales recorrieron todo el interior provincial recolectando los planteos de la población.
“Lo de la oposición levantándose del debate es la misma actitud que tuvieron en 1998, en 2002 y en 2008, no nos sorprende, siempre se retiraron de los ámbitos deliberativos. No cumplieron con el mandato popular y al igual que en todos los procesos de reforma anteriores lo judicializaron”, dijo en “Riojavirtual Radio” el presidente de los convencionales del peronismo, Pedro Goyochea.
El texto constitucional no incluye ninguna cláusula transitoria.
En el caso de los diputados y concejales, no precisa desde cuándo se cuentan los mandatos para aplicar la limitación de una sola reelección sancionada. Inclusive, hubo convencionales que hicieron declaraciones públicas contradictorias sobre cómo se toman los mandatos actuales.
Por su parte, en el estamento de Gobernador y vicegobernador, no hubo modificaciones en relación al periodo del Gobierno ni las reelecciones, pero tampoco se incluyó una cláusula transitoria que aclare la situación de Ricardo Quintela y Teresita Madera precisando de qué modo debe computarse el periodo 2023/2027.
En el oficialismo aseguran: “Una ley no es retroactiva y será la Justicia electoral la encargada de determinar sobre futuras candidaturas que puedan ser impugnadas”.
La ausencia de cláusulas transitorias deja algunas dudas. ¿Si Ricardo Quintela y Teresita Madera asumieron con una Constitución y luego juraron otra, pueden plantear que 2023/2027 es su primer mandato con el nuevo texto constitucional? ¿Surgirá en los próximos años algún planteo ante la Justicia riojana para pedir certezas sobre estos puntos? ¿Cuál es el primer mandato de los diputados y concejales y desde qué periodo rige el límite a su reelección?
Está claro que en lo jurídico hay una ventana que quedó abierta y en este tipo de procesos cuesta creer en las casualidades. ¿Y en lo político qué puede pasar?
Faltan poco menos de tres años para definir candidaturas a gobernador y vice, pero en el caso de los legisladores provinciales, el año que viene habrá elecciones y podría ser la primera oportunidad para trasladar este tema al barro de la política.
En público todos los funcionarios, algunos convencionales y hasta el propio Ricardo Quintela descartan cualquier posibilidad de un nuevo mandato para el Gobernador. Sin embargo, en las más altas esferas del Gobierno provincial hay quienes ya empiezan a poner en duda esa posibilidad.
“Maza tuvo la posibilidad de tres mandatos y Beder Herrera en total tuvo tres periodos con el de los ‘90, por qué Quintela no”, se preguntó hace unos días uno de las personas con más llegada al mandatario provincial. Ante la repregunta del cómo imaginarían legalmente forzar una nueva candidatura, las precisiones se agotaron en la ejecución de una extraña mueca.
En este punto, tampoco se puede pasar por alto que también puede tratarse de una estrategia política.
Quintela comenzará a transitar en los próximos años la pérdida de poder lógica que enfrenta todo dirigente que no tiene reelección en su cargo, pero dejar esta alternativa abierta puede funcionar como una “advertencia” al resto del sistema político de que a lo mejor su tiempo no terminó y funcionar como un elemento disuasivo de intentos de construcción política anticipados en el tiempo.
¿Hay margen en la sociedad para que el Gobernador busque un nuevo mandato? Y yendo un poco más allá y aunque nadie hoy levante la mano en público, hay otra pregunta todavía más compleja en su respuesta por sus implicancias internas: “¿Hay margen en el peronismo riojano para que Quintela intente otro mandato?
Sin dudas que la limitación de los mandatos de diputados y concejales es un avance, es un mecanismo que puede ayudar a la mejora del sistema republicano a partir de la renovación de figuras dentro del mapa político de cada departamento.
Por otro lado y en relación a la cuestión de la paridad de géneros para los cargos electivos, daría la sensación de que la reforma se quedó a mitad de camino. El nuevo texto constitucional habla de “promover” la paridad en los cargos, dejando librado a la discrecionalidad del poder político al momento de implementar las formas y los modos en que dicha promoción se concretará. El texto constitucional no es específico en este punto.
La oposición se levantó y se retiró de la Convención, afirmando además que lo actuado es nulo y no descarta terminar judicializando todo lo sancionado. El oficialismo asegura que la ausencia de cláusulas transitorias se debe a que hubieran resultado redundantes y aclara que las normas no son retroactivas. Quintela dice que no en público, pero en privado varios susurran otras cosas. La validez de algunas candidaturas serán resueltas en el futuro por la Justicia electoral.
¿Ya terminó o recién comienza? La respuesta a esa pregunta marcará el clima político de la Provincia en los próximos años.