Un terremoto de magnitud 7 sacudió este viernes la región septentrional marroquí de Marrakech, sin que se sepa de momento si se han producido víctimas o daños materiales.
Según un boletín de alerta sísmica difundido por el Instituto Nacional de Geofísica marroquí, el terremoto se produjo a las 23.11 hora local (00.11 GMT del sábado). Tuvo su epicentro en la localidad de Ighil, situada 63 kilómetros al suroeste de la ciudad de Marrakech, a una profundidad de 8 kilómetros, indica dicho boletín.
Según testigos contactados por EFE, el temblor se sintió en localidades norteñas como Larache, a 550 kilómetros del epicentro, así como en Casablanca y Rabat, a 300 y 370 kilómetros, respectivamente, donde sus habitantes salieron a las calles en prevención de un posible segundo temblor.
Sofía Catalá, española residente en el centro de Marrakech, explicó a EFE que durante el terremoto «se empezó a mover el suelo como en un bombardeo». «Pensaba que se caía el edificio, ahora está todo el mundo en la calle en pijama», añadió. Minutos después del seísmo, desde la calle, Catalá indicó que, ante las sacudidas, todos los vecinos de su edificio salieron y que cayeron barandillas y otros objetos de los balcones, pero añadió que ella no vio ningún edificio a su alrededor con daños importantes.
Said, un vecino de Casablanca, confirmó a EFE haber sentido el terremoto. «No ha sido muy fuerte, pero duró 15 segundos sin parar. Llamé enseguida mi familia a Marrakech y allí ha sido fuerte, mi cuñada hasta se desmayó por el susto», explicó por teléfono.
Aunque no se anunció un balance oficial de daños materiales ni humanos, los internautas compartieron fotos y vídeos de casas dañadas o derribadas parcialmente en el barrio antiguo de Marrakech, supuestamente por el terremoto.